Gabriel Olivares dirige el texto de Alicia Montesquiu sobre las mujeres que rodearon al torero cordobés
En la intrahistoria de nuestro país todavía puede ver más intrahistoria, y si le ponemos imaginación, todo pudo ser de otra forma e, incluso esta, pudiera hallarse más cerca de la realidad. Alicia Montesquiu, quien viene de actuar en La lluvia amarilla, ha retirado del foco a la gran figura del toreo para desvelar los trazos oscuros y para especular estéticamente sobre todo lo que ocurrió a su alrededor. El contenido de esta función es un tanto reducido; aunque se manifiesten distintas vilezas de calado. Por ello, el armazón que ha creado la dramaturga ha sido sobredimensionado por Gabriel Olivares. El director lleva años desarrollando una faceta más artística en paralelo a su visión más comercial. Con el TeatroLab se ha dispuesto a la investigación teatral a través del Método Suzuki y la técnica de viewpoints. Sigue leyendo