Mireia Gabilondo da ritmo a una comedia tremendamente comercial de Markos Goikolea en El Pavón

Si en los últimos tiempos hemos podido disfrutar de algunas obras de carácter comercial con una cierta enjundia de fondo, estoy pensando, por ejemplo, en Una terapia integral y, recientemente, en El favor. También hay que reconocer que existen demasiados de estos productos decantados con totalitarismo por atiborrar el libreto de chistes y estupideces a cada segundo para atenazar al respetable. Valen, es sencillo percibirlo, para entretener; pero raramente dejarán algún poso, que es lo mínimo que se le puede exigir a una función teatral. Mireia Gabilondo (pluriempleada del año) se sitúa al frente de una propuesta que, curiosamente, tiene alguna concomitancia con su propia obra Sabes que las flores de plástico nunca han vivido, ¿verdad?, pues la protagonista, además, se «enmascara» en un trastorno sicológico (hasta el punto de que Aitziber Garmendia interpretó aquella y esta). Sigue leyendo


