Antonio Simón cuenta con un buen elenco para dirigir esta tragedia de Shakespeare en los Teatros del Canal

Si a principio de temporada daba cuenta de la versión contemporánea ofrecida por Emilio del Valle, ahora llega la mirada más ajustada al original de Antonio Simón para trazar la biografía de héroe. Ambas propuestas dialogan, en cualquier caso, con nuestro presente. Es fácil encontrar líderes por doquier tan ambiciosos como nuestro protagonista rodeado de grupos igualmente pertinaces. Volvemos a encontrarnos, por lo tanto, con una función que sobresale, ante todo, porque el elenco está configurado por actores y actrices de gran solvencia. Creo que Roberto Enríquez es una estrella de la interpretación teatral que no está considerado como se debe. No hará ni unos meses cuando demostró sus habilidades en Los cuernos de don Friolera. Sigue leyendo
Esta obra es lo que parece. Si ustedes tienen el prejuicio afinado, después de asistir a este montaje lo convertirán en aseveración. La sempiterna comedia francesa con idiota por el medio (y con cena quemada incluida), con humor de ironía tontorrona, o sea, la manifestación ridícula y ridiculizante de la clase alta de nuestro exquisito país vecino. Nadie perderá las formas, las cuales, ante todo, son lo fundamental. Por eso funcionan tan bien los Chiens de Navarre con sus espectáculos satíricos. Algo necesitan satirizar.
Esta obra ya se ha interpretado de múltiples maneras, casi tantas como 