La obra teatral del novelista Luis Martín-Santos, influida por el realismo estadounidense, sube al escenario del Teatro Español

Es habitual recalcar de las obras narrativas o dramáticas algo así como que «el menos es más». En cuántas podemos detectar que sobra aquí o allá a causa de las reticencias del autor a desprenderse de algo que le ha costado tanto escribir. Sin embargo, para el caso que nos compete, ocurre totalmente lo contrario. ¿Cuánto le faltaría a Viaje hasta el límite para que los cambios no fueran tan abruptos? Es difícil hacerse una idea, pero pongamos tres cuartos de hora para que las tretas y los tratos se maduren, y para que los amores intempestivos no parezcan éxtasis de adolescentes. Por esto, esencialmente, el texto teatral de Luis Martín-Santos no es buena, ya que, como veremos, los personajes no tienen ocasión de redondearse como se requeriría. Sigue leyendo
Somos afortunados de poder asistir a un espectáculo teatral con un elenco de veinticinco intérpretes. En la versión de Lluís Homar no se llegó tan lejos y, en la más reciente de